sábado, 9 de febrero de 2013

"Lo Imposible". Disección del Tsunami emocional.


Con una historia relativamente simple, la búsqueda de una familia dividida de el resto de sus miembros tras la catástrofe natural que sobrecogió al mundo en 2004, comienza la última película de J.A.BAYONA.  Fue en 2004 cuando ese Tsunami de proporciones bíblicas asoló la costa de Tailandia conocida por el gran afluente turístico que fue arrasado con una innumerable cantidad de pérdidas materiales y, sobretodo, humanas. En un resort de lujo van a pasar las vacaciones la familia Barnes y es allí donde se ven sorprendidos por la gran ola. Tras esta desastre sus miembros comenzarán la búsqueda del resto y sobretodo la procura de sobrevivir ellos mismos.

De todos es sabido que la cinta de Bayona ha logrado ser la segunda película más taquillera en España de la historia - tras Avatar, Ejem ejem-, habiendo sido los 30 millones de euros que costó y que sólo en nuestro país  fueron ampliamente superados (más de 42 millones recaudados). A nivel internacional se puede destacar su gran acogida en UK y su buena acogida en USA. Habiéndose quedado la película cerca de los 100 millones recaudados. En América con una distribución paulatina no ha cosechado los esperados éxitos  pese a la buena recepción de la crítica, por el hecho de estrenarse junto a muchas de las favoritas para los popularmente trascendentes premios OSCAR. No me cabe más opción,  es completamente necesario, criticar la desfachatez de MEDIASET a la hora de promocionar en nuestro país la película de manera tan masiva, los resultados para los escépticos como yo, acompañados por las declaraciones del "gran" público véase frases recurrentes como: "Hay que bien me lo he pasado, pero he llorado mucho" o los "muy bonita llevate los kleenex al cine es muy triste". Estos pequeños detalles produjeron en mí persona más que curiosidad un rechazo inmediato ante el fenómeno que cual ola gigantesca se llevaba todo a su paso. Algo parecido me ocurrió con "Argo" y todo lo contrario con, por ejemplo, "Le havre", donde con casi sin medios y bajo el principio menos es más se nos relataba una pequeña gran historia, donde el cine se muestra como el fin para mostrar una realidad necesaria que a su vez es imposible (tema  que como ya veremos, de manera más banal pero también expresiva se muestra en ésta cinta).




Hay algo inatacable en "Lo Imposible", refiriéndome a ésta no como película sino como producto que en sí, y tal y como se ha vendido, es sencillamente perfecto. Es lo que nuestro cine necesita. Una aparentemente ampulosa producción que con un par de trucos bien utilizados se consigue tapar la imposibilidad de rivalizar con las grandes producciones de las majors estadounidenses. Dos caras conocidisímas como puedan ser Ewan McGregor o Naomi Watts, ambos han demostrado en infinidad de ocasiones los grandes actores que son aunque personalmente sus papeles en las imborrables "Mullholand Drive" (revisión surrealista y demente del mundo de las actrices al más puro estilo "Eva al desnudo" que induce a una visión incluso más profunda sobre la realización del propio ser) y "Trainspotting" (una de las mejores películas de los noventa, ofreciendo el relato más histérico, imaginativo, inteligente y pop del género de la drogadicción). A los actores le sumamos un acercamiento al estilo del maestro Steven Spielberg, indudable calidad incluso con trabajos muy desacertados. El cual declarado por Mark Cousins en su historia del cine uno de los creadores del nuevo cine, tras "Tiburón" y junto a "El Exorcista" y "Star Wars" : " Una nueva era comercial priorizando las sensaciones sobre la contemplación" "(...) un mayor énfasis en la evasión y el impacto". Deudor es aquí Bayona de los  maestros, donde la inmediatez de la acción y la identificación con unos personajes de la manera más  cercana es su principal herramienta. Este la ejerce mediante la creación de sensaciones a través de la notable b.s.o de Sergio G. Sánchez o una cámara que sigue incluso en los momentos más duros, donde la fragilidad de los personajes queda expuesta, a los personajes, sintiendo nosotros los impactos como si fuéramos ellos, alcanzando una viveza cerca de la humanidad. Pero también a la hora de narrar donde los personajes principales, la familia, son los únicos elementos a seguir, algo de lo que hablaremos y matizaremos más adelante.


"Lo Imposible" es irrepetible pero no por su capacidad artística sino por la nueva ley que entra en vigor,  supuestamente en 2014, bajo ésta no se considerarán españolas aquellas películas que no estén íntegramente rodadas en el idioma de Cervantes. Es decir, pese a que los actores no sean nacionales, todos los elementos de esta película (personal, materiales, producción) son indudablemente patrios. Con ésto lejos de permitir la difusión de nuestras películas de mayor entidad se les privarán gran parte de  las ayudas estatales. Y, sinceramente, dudo que con un reparto patrio la película a nivel internacional - y seguramente nacional- no hubiera recaudado ni una tercera parte. Impidiendo así la difusión de nuestros directores más internacionales y su habitual practica de extranjerización del reparto (Veáse Amenabar, Medem o dentro de poco Vigalondo) destinándoles casi exclusivamente al público español. Público que, esto es indudable, quiere ver películas españolas que traten los menos temas posibles de su país. Actitud generalizada, ridícula  tópica y tópificada -en cuanto nos adentramos en el mundo cinéfilo vemos cierto respeto a nuestra industria-.. Y os preguntareis cual ha sido la respuesta al director al éxito y, posiblemente, a estas medidas. Muy fácil, trabajar para el engranaje americano, irse de España en busca del éxito internacional, actitud tremendamente discutible; no hace falta ejemplificar con una lista casi infinita de directores que probablemente acabaría en Haneke o Kioristami. Donde la no ya capacidad de un autor de crear arte sino la necesidad de hacerlo sobre su país eran alicientes continuos que enriquecían sus obras y la visión cultural ajena que se tenían de emplazamientos.  Aunque es cierto que la actitud hacia  las subvenciones, polémicas y escandalosas como mínimo, invitan a la huida  Me gustaría saber lo que el exiliado Buñuel, censurado sistemáticamente por el  necio totalitarismo,hubiera dicho de esto.


¿Conseguirá esta familia el ansiado reencuentro?


Me voy a centrar, puesto que la premisa es conocida por todos, en detalles concretos de la cinta; así que lo que sigue contiene varios destripes importantes que los asumo dado el éxito de la cinta, pese a que suelo renegar de éstos, creo que servirán para fundamentar bien el resto del artículo.

La factura técnica es sobresaliente pero donde destaca (por encima de la notable fotografía o los tramposuelos montaje y guión) es en el aprovechamiento de los recursos. Bayona se las apaña para que su tsunami impacte como si costará más de lo que parece. Y es a través de diálogos entre varios personajes donde se ahorra posibles escenas  realmente caras de la película, como cuando McGregor se reúne con unos cuantos superviventes en un refugio listos para salir en búsqueda de sus familiares y narra el reencuentro con sus hijos, donde mejor se aprecia. De hecho, los escenarios desolados  aúnan bien escenas computerizadas (CGI) con elementos naturales;  las escenas del tsunami en sí no son tan numerosas como puedan parecer, el metraje inferior a las dos horas. Elementos bien llevados que esconden el buen uso de esta práctica.





Antes de la catástrofe, las vacaciones de una familia "plena".
Si  recordamos esa escena de Ewan , con la consiguiente valoración de la batería  del teléfono cual diamante que pronto se convierte en un diálogo bastante efectivo sobre la solidaridad, nos damos cuenta que la narración está trufada de muy buenos momentos. Quizás, el mejor sea esa descriptiva escena donde mientras Watts es inducida a un coma incapaz de recordar un momento feliz rememora el dolor físico y emocional que ha supuesto el incidente culminando magistralmente en esa mano que se yergue desde el agua como estímulo vital, alegoría sobre la voluntad. El joven Tom Holland, el que más minutos, y muy bien utilizados, acapara en la pantalla nos regala numerosas grandes escenas y aunque el diálogo sea opuesto, me ha recordado en numerosas ocasiones al tratamiento del personaje principal de ese clásico de la animación japonesa que es "La tumba de las luciérnagas" . Pero  el nivel no es así siempre, la colaboración de Geraldine Chaplin es fútil, ya que el diálogo que sale de la intérprete es básicamente repetido de mil y una cintas. Además pronto se incurre en la búsqueda de lágrima fácil en el espectador con alguna escena bochornosa. Pese a ello hay numerosos alivios cómicos para el drama, permitiendo al espectador menos cinéfilo no aburrirse, y suelen estar bastante acertadas. Pese a que antes elogiaba a los actores, más discutible es su elección  El motivo es sencillo la búsqueda de réditos económicos traiciona la hispanidad de las personas en las que se basa, curioso porque atenerse a la historia de manera inmediata como si fuera veraz luego se convierte en una de sus mayores contradicciones. Además,  como muchos se han hecho eco la película, pese a estar perfectamente documentada, ignora o, mejor dicho, obvia a la población autóctona apareciendo en pocas escenas y casi nunca padeciendo las catástrofes del desastre. Siendo retratados como almas caritativas sin ninguna profundidad en el discurso. Una mayor visión de la catástrofe (dado que desde el punto de partida te separas de la realidad a la hora de abordar el proyecto para ser más vendible), de sus consecuencias y sin perder el estilo hubiera sido quizás la manera de convertir esta en una gran película, que obviamente no es. También se notan efectismos en la narración que siempre busca el impacto por encima de la lógica (el  reencuentro de Mcgregor con sus hijos, la búsqueda de Holland de su madre ingresada...).



En conclusión nos queda una buena cinta, de gran poder conmovedor, que  está algo desaprovechada y cuyos postulados ni son completos ni, desde luego, originales. Me quedo con esos descriptivos planos de Bayona  a esa pelota, esa página de un libro, ese muro/cortina de cristal y, sobretodo, la naturaleza que sobrevive a través de una babosa o un cangrejo a esa irrefrenable catástrofe natural. Del retrato familiar hay cosas que funcionan y otras que no, una vez en el avión tras haber conseguido lo imposible se nos contrapone dos visiones: la de un hijo contándole a su madre que ha visto a ese niño desamparado con su padre y la de un hombre que desdoblando un papel que creía perdido, donde se leen los nombres de los  familiares de su compañero de búsquedas,  entiende realmente la dimensión trágica de la catástrofe cuando rememora ese "Estamos en la playa". Con Lo Imposible, por todo lo expuesto nos queda una cinta española insustituible e histórica, pese a sus imperfecciones, pero lo lamentable que queda del asunto son esas futuras limitaciones estatales a nuestro cine, tras un montón de películas buenas que si bien la excelencia es discutible, no queda más remedio que esperar hasta 2014 y ver sus películas dictaminando si las medidas han sido correctas, o más bien, una limitación a nuestra industria.







4 comentarios:

  1. A mi en particular me gustó bastante y Naomi Watts tiene merecida su nominación al Oscar.

    Un saludo

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  2. Qué interesante. No tenía ni idea de la ley de 2014. La verdad es que no sé qué pensar. por un lado es cierto que no habríamos conseguido el mismo éxito con actores españoles, pero tampoco habría sido tan cara... Y a la vez no deja de ser una traición hacer un film de una familia real española con Naomi e Ewan, por muy bien que ambos estén. Sin duda ha sido un producto sobresaliente que ha ayudado a nuestro cine a destacar; lástima que muchos ignoren que el equipo que hay detrás es español. Veremos cómo la tratan los Goya. Un saludo.

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  3. A mi no me emocionó mucho, la verdad. Hubiese quedado mejor si hubiese abrazado más abiertamente el género catastrofista, algo que hace (hay un montón de personajes-tipo vistos en infinidad de películas del genero...) pero como con vergüenza.
    Buena factura técnica y realización correcta, pero en absoluto brillante. Y el final es para echar a correr y no parar de la manipulador y tramposo que es...
    Saludos

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    1. No es que tenga ninguna vergüenza en mostrar el género de catastrófes es que con 30 millones de euros y esos actores el presupuesto no da para más, algo que recalco en el artículo mínimo dos veces. Yo no tengo nada que objetar a la historia que narra Lo Imposible (se asume con la forma de la narración) sino a lo que se deja en el tintero. Tampoco afirmo que sea una gran película sino que es buena. León compañero mío, te has leído entero el artículo o has malinterpretado el último párrafo?

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