miércoles, 30 de enero de 2013

""El Vuelo". Yo elegí la bebida.





Whip Whitaker -Denzel Washington-  pasa una mala racha. Han pasado varios años desde una ruptura por culpa de su adicción al alcohol. Con el tiempo se ha convertido en un personaje  indómito. Un día, tras una larga juerga se pone a los mandos de un avión, éste por culpa de clima, de su estado intrínseco o puede que del propio Whip -no desvelaré detalles-  se provoca un gran accidente que traerá consigo varias muertes. Pronto se abrirá una investigación para averiguar las causas del choque donde el propio Whip es objetivo de toda serie de acusaciones. Se establecerán numerosos conflictos fascinantes sobre el recto hacer, sus circunstancias -sin son o no determinantes- y la difícil decisión de a quien imputar la  responsabilidad respecto a los difuntos. En ese período, el acusado en un ejercicio de introspección,  rememorará todos los hechos acaecidos a lo largo de sus últimos años y establecerá nuevos lazos con diversas personas. Pero el cristalino Vodka, la rubia cerveza o el aromático Whisky estarán, de manera más que probable incluso cuasifatídica, presentes.


No saben las azafatas el vuelo tan movido que les espera.


jueves, 24 de enero de 2013

A Roma con Amor y Ruby Sparks.

Tras un receso de poco menos de un mes el blog se reactiva. Ha sido bastante casual la elección de las cintas, de hecho, no buscaba establecer un puente entre ambas, pero es innegable que ahí está. Tanto en Ruby como en Roma se nos desarrollan (entre otras cosas) dos historias románticas a los inicios de la etapa de madurez, la narración se ve trufada con ricas referencias, en su mayoría, literarias. Los personajes, en ocasiones, cultivados despliegan su ingenio en numerosas secuencias robándonos varias sonrisas y alguna carcajada. Es digno de mención que Roma con amor nos devuelve a un Woody bastante desenfadado y tan autocomplaciente como esta última década aunque con obvios matices recalcables; aquí, personalmente no hay nada que objetar. En cuanto a Ruby nos encotramos con unos creadores detrás bastante interesantes. Los directores, todavía para muchos desconocidos, Jonathan Dayton y Valerie Faris nos traen su segundo largometraje, tras la entrañable, conmovedora y muy reivindicable Pequeña Miss Sunshine. Pero la verdadera estrella en la cinta es Zoe Kazan, la nieta del genio Elia. Bajo su batuta está un guión, del que ya hablaremos, y la interpretación del personaje más lucido de toda la cinta. La mano de Kazan es mucho más larga que la de los directores en esta cinta de origen independiente. Es pues, una labor interesante contraponer la película de un maestro, mucho más cerca del fin de su carrera que del inicio, con una joven cineasta en ciernes con ideas la mar de bien ensambladas. A continuación una breve reseña de cada película.